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  • La Congregación recuerda que, al marcar conjuntamente las casillas 105 y 106, se colabora con un 0,7% de la cuota íntegra del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a sostener la acción de la Iglesia y con otro 0,7% a apoyar los fines sociales 
  • Elegir las dos casillas no supone pagar más en el IRPF ni que la devolución sea menor, al contrario, se incrementa hasta el 1,4% el porcentaje de dinero de los impuestos que irá destinados a causas sociales

A principios de este mes de abril se abrió la campaña de la declaración de la renta correspondiente al año 2021. Y son muchas las personas contribuyentes que aún desconocen que, en la declaración de la renta, se pueden marcar simultáneamente las casillas 105 y 106 y colaborar con el 0,7 % de la cuota íntegra a la Iglesia y con otro 0,7 %, a los Fines Sociales. De estas aportaciones, la congregación de las Religiosas Adoratrices en la provincia Europa-África recibe ayuda a través de sus distintos proyectos y comunidades para el desarrollo de los programas que lleva a cabo en España.  

A pesar de que durante los últimos ejercicios las personas que han marcado ambas casillas se han incrementado, el año pasado uno de cada tres contribuyentes no cubrió ninguna de las dos. Por eso, desde Adoratrices quieren recordar que elegir las casillas 105 y 106 no supone pagar más, ni percibir menos devolución y, al contrario, permite ayudar así el doble. 

“Es un gesto de compromiso y solidaridad que no cuesta nada y con el que podemos ayudar atodas aquellas personas que realmente lo necesitan, para no dejar a nadie atrás”, explicó Carmen Ynzenca, coordinadora técnica de Adoratrices  Europa-África.  «Tras dos años de pandemia, la crisis sanitaria, social y económica provocada por la Covid-19 ha aumentado aún más la vulnerabilidad de muchísimas personas, sin embargo gracias a las personas contribuyentes que marcaron ambas opciones  entidades como la nuestra puede seguir trabajando aún más para ayudar y asistir a millones de personas que lo necesitaron. Ahora esta ayuda sigue siendo igual de importante, ya que la pandemia ha afectado especialmente a las personas más vulnerables” añadió Ynzenca.

 106, fines sociales 

Al marcar la casilla 106 en la declaración de la renta, el 0,7% de la cuota de los impuestos se destina a actividades de interés general en tres grandes áreas: Acción Social, Cooperación al Desarrollo y Medio Ambiente. Los fondos se asignan a ONG a través de procesos de convocatorias a nivel autonómico y nacional. En 2021 se recaudaron más de 386 millones de euros.  

Gracias al sencillo gesto de marcar la casilla de la denominada “X Solidaria” se pueden financiar programas que van dirigidos a las personas mayores, a las personas con discapacidad, a las personas migrantes, a personas jóvenes, a mujeres, a los niños, niñas y a las familias, entre otras muchas. Son programas que, todos los años, atienden diferentes realidades concretas como las que aborda la Congregación de las Religiosas Adoratrices a través de sus distintos proyectos y comunidades, en las que ayudan a cientos de personas en situaciones de vulnerabilidad  y/o contextos de violencia, en especial a mujeres y menores.   

105, Sostenimiento de la Iglesia Católica 

Desde 2007 la Iglesia no recibe dinero con cargo a los Presupuestos Generales del Estado y renuncia a la exención del IVA. Ese año se modificó el Acuerdo de 1979 entre España y la Santa Sede sobre asuntos económicos y se creó la casilla 105 para el sostenimiento de la Iglesia Católica. 

Como se explica en la página de la campaña  Xtantos, la cantidad que se recibe de los contribuyentes que marcan la casilla 105 se reparte solidariamente desde el Fondo Común Interdiocesano. 

Este Fondo, que se nutre de las aportaciones directas de los fieles y de los contribuyentes, se distribuye entre las diferentes diócesis en función de su tamaño y sus necesidades. Supone de media el 25% de la financiación de las diócesis en España. 

 ¿Y qué pasa si no marco ninguna casilla? 

En el caso de no marcar ninguna de estas dos casillas, será el Estado quién decida el destino de esta parte de los impuestos. La asignación se imputará a los Presupuestos Generales del Estado, es decir, que se delegará en éste la decisión sobre el destino de este dinero, en un país en donde el gasto en protección social está muy por debajo de la media europea